MELBOURNE, Australia – La metodología utilizada en economía del comportamiento está cada vez más presente en nuestras vidas y se está extendiendo a diversos campos fuera de los laboratorios que hay dentro de las universidades. Desde áreas mas cercanas a la economía como marketing, recursos humanos o producción hasta otras como salud o educación, la economía del comportamiento intenta buscar soluciones a problemas de distinta índole. Por ejemplo, cómo mejorar las ganancias por la venta de un producto (Gneezy & Gneezy, 2010), cómo superar la falta de motivación en el trabajo, ineficiencias en la producción o gestión de empresas (Lazear, 1996), […]